- Análisis de la técnica de espalda

Como en el crol, el estilo espalda consiste en una acción alternativa de brazos y de piernas. Sin embargo, a diferencia de este, los nadadores están en posición dorsal. Esto les obliga a realizar las brazadas con una trayectoria más lateral que por debajo del agua.

Es el único estilo en el que la cara nunca se sumerge en el agua, excepto en los virajes y las salidas. Por este motivo, algunos afirman que el ritmo respiratorio no es tan importante. Sin embargo, el coordinar la respiración con los movimientos de brazos es fundamental para que la fatiga surja lo más tarde posible.

Otra característica que comparte con el estilo crol es que el cuerpo gira a través de su eje longitudinal, excepto la cabeza que permanece fija; es lo que conoce como rolido pero en posición supina.

Los movimientos propulsores de las piernas también tiene similitudes con el crol, ya que es un movimiento alternativo de las piernas, de arriba a abajo. La diferencia, aparte de la posición dorsal, es que la propulsión se realiza con el movimiento ascendente de cada pierna.

Centrémonos ahora en la técnica de cada apartado, ya que tendremos que analizar con detalle la acción de piernas y brazos, la posición del cuerpo, la coordinación y la respiración, así como la salida y el viraje.



1. LA ACCIÓN DE LAS PIERNAS

Consiste en un batido alternativo de piernas en diagonal y su misión es la de mantener horizontal el cuerpo, compensar y equilibrar la acción de los brazos. Además, si la flexibilidad de los tobillos es la adecuada, contribuirá también a la propulsión de los brazos cuando el impulso de estos es mínimo (durante el agarre). Las rodilla se flexionan más al inicio del batido con respecto al crol.

El batido de seis tiempos es muy importante (mucho más que en el crol). Las rodillas no rompen la superficie y los pies deben estar sueltos y relajados, permaneciendo dentro del agua y rompiendo ligeramente la superficie.

El movimiento de piernas en el estilo completo no es vertical, ya que por acción de la rotación sobre el eje longitudinal de la cadera (rolido), éstas se mueven hacia dentro y hacia fuera además de los movimientos ascendentes y descendentes.



   1.1. DESCRIPCION DE LAS FASES.

Batido descendente. 
Partiendo de la pierna totalmente extendida, con el pie ligeramente rotado hacia adentro, se produce un descenso del muslo y pierna sin flexionar la rodilla y con el pie relajado. El muslo de la otra pierna inicia la ascensión, se acrecienta ligeramente el doblamiento de la rodilla y el tobillo se flexiona por la planta.
Cuando el pie llega a una profundidad que sobrepasa la parte inferior del cuerpo, el muslo se va elevando, y a su vez la rodilla se flexiona haciendo descender el pie y flexionándose éste por la planta. En este momento, la otra pierna casi ha completado su batido ascendente.

Batido ascendente. 
El ángulo formado por el muslo y la pierna es de alrededor de 95 grados. El movimiento continúa con una fuerte extensión de rodilla y el pie se extiende o flexiona por la planta al ser llevado hacia arriba. 
Cuando la rodilla alcanza su máxima altitud (entre 2,5 y 4 centímetros por debajo del agua), los pies muestran una evidente desaceleración. La otra rodilla ya ha iniciado la ascensión.
A medida que los pies se aproximan a su máximo de separación queda completado el ciclo del batido de piernas y seguidamente comienza uno nuevo.



2. LA ACCIÓN DE LOS BRAZOS

La brazada de espalda consta de cuatro barridos y un recobro.


   2.1. EL BARRIDO.

También denominado tracción o fase acuática, consta de cuatro etapas consecutivas:

Un primer barrido descendente (acción no propulsora), que comienza con la entrada de la mano en el agua directamente por encima del hombro, con el brazo completamente extendido, el dedo meñique entrando el primero y la palma de la mano mirando hacia afuera. 
El brazo izquierdo se hunde en el agua con el codo extendido y la palma de la mano aún mirando al exterior (en este momento el brazo derecho se mueve hacia arriba).
El cuerpo comienza a girar hacia el brazo que tracciona y el izquierdo se desplaza hacia abajo y hacia afuera para alcanzar la posición de agarre. El brazo derecho empieza a salir a la superficie.

Un primer barrido ascendente (fin del agarre e inicio de la propulsión). El codo izquierdo comienza a flexionarse, mientras el brazo va hacia abajo y de forma lateral. La tracción del brazo izquierdo continúa a medida que la flexión del codo va aumentando (la mano que tracciona mira casi directamente hacia atrás). El brazo derecho recupera hacia arriba.

Un segundo barrido descendente (momento más impulsor). Cuando el brazo izquierdo alcanza la altura del hombro, el codo tendrá la flexión máxima de 90 grados. El brazo derecho, el que está recuperando, inicia su rotación, girando la palma hacia fuera del cuerpo.
El codo del brazo izquierdo empieza a extenderse cuando la mano ha rebasado el hombro y el brazo se desplaza hacia atrás y hacia abajo siguiendo un camino semicircular. En este momento el cuerpo alcanza su máximo balanceo de 40 a 45 grados.
La palma de la mano derecha cambia de posición, llevándola más cerca del cuerpo y empieza la impulsión casi directamente hacia abajo (el brazo que recupera continúa su trayectoria vertical).
El brazo izquierdo termina su tracción con el codo completamente extendido y con la palma de la mano hacia abajo, un poco por debajo de las caderas. Esta impulsión de la mano hacia abajo ayuda a elevar el hombro izquierdo.

Un segundo barrido ascendente (precede al recobro o fase aérea). A medida que la mano derecha entra en el agua, el brazo izquierdo inicia su recuperación hacia arriba. En este punto de los movimientos ninguna de las manos ejerce fuerza propulsiva alguna.
El hombro izquierdo hiende el agua antes de que se inicie la recuperación del mismo brazo. La mano derecha se hunde en el agua, preparándose para su ataque.

Fin de la fase propulsora. El ataque de la mano derecha se realiza con el codo estirado, mientras que la mano izquierda inicia su recuperación saliendo del agua.


   2.2. EL RECOBRO.

También llamado fase aérea. La flexión del brazo derecho se hace evidente a medida que baja y la mano aplica su fuerza apuntando hacia atrás. El hombro izquierdo se eleva por encima del agua debido a la rotación del cuerpo. 
El brazo que tracciona ha completado la mitad de su movimiento de tracción y la mano avanza hacia el cuerpo. A medida que el brazo izquierdo inicia su impulsión hacia abajo, la pierna izquierda continúa impulsando diagonalmente hacia arriba.
La mano izquierda, con la palma hacia fuera, continúa su movimiento de recuperación, mientras la mano derecha impulsa hacia atrás y abajo.
El brazo derecho termina la tracción cuando la mano izquierda casi ha terminado la recuperación y el ciclo total del movimiento queda ahora completado.


3. LA POSICIÓN DEL CUERPO.


La cabeza se situará de manera que la superficie del agua esté al nivel del nacimiento del pelo en la nuca, o bien que la mirada se dirija con una inclinación de 45 grados con respecto a la superficie. En el plano sagital siempre permanecerá perpendicular al agua a pesar del rolido.


El giro del cuerpo es similar al de crol, sin embargo la cabeza ha de permanecer fija mientras el cuerpo gira hacia un lado y otro. Este movimiento de caderas y hombros es menos amplio que el giro en crol.
Es importante rotar el cuerpo en sincronización con los movimientos de los brazos y hacerlo en la misma dirección en que se estén moviendo los brazos, para así evitar que las caderas y las piernas se balanceen de lado a lado. Si estos rolidos no se coordinan apropiadamente el cuerpo se verá empujado fuera de la adecuada alineación. 
El cuerpo debe rotar como una unidad y aproximadamente unos 45 grados a cada lado.

En cuanto a la alineación horizontal el espaldista ha de estar prácticamente horizontal con respecto a la superficie del agua aunque flexionando ligeramente la cintura. Los hombro han de mantenerse más altos que las caderas, estando el pecho por encima de la superficie del agua y las caderas justo por debajo (aprox. unos 5 centímetros), lo suficiente para que las piernas no salgan del agua.


4. LA COORDINACIÓN


BRAZOS - RESPIRACIÓN. Conviene que el nadador realice la respiración rítmicamente, inspirando en la entrada de un brazo y espirando durante la entrada del otro.
BRAZOS - PIERNAS. La importancia del batido en espalda hace que la coordinación que se utiliza de una forma casi generalizada sea el batido de 6 tiempos. Se realizará de la siguiente forma:
 - Primer batido acaba al final del agarre.
 - Segundo batido acaba al final del empuje.
 - Tercer batido acaba en la segunda parte del recobro.
BRAZO - BRAZO. Un brazo entre en el agua mientras el otro está realizando el empuje (posición similar a la de las agujas del reloj a las ocho en punto).






   4.1. ORDEN DE LAS FASES.

1. Batido ascendente pierna izquierda y entrada de la mano izquierda en el agua.
2. Batido ascendente pierna izquierda y primer barrido descendente o agarre brazo izquierdo.
3. Batido ascendente pierna izquierda y primer barrido ascendente o tirón brazo izquierdo.
4. Batido descendente pierna izquierda y primer barrido ascendente o agarre brazo izquierdo.
5. Batido descendente pierna izquierda y segundo barrido descendente o empuje brazo izquierdo.
6. Batido ascendente pierna izquierda y segundo barrido descendente o empuje brazo izquierdo.
7. Batido ascendente pie izquierdo y segundo barrido descendente o empuje brazo izquierdo.
8. Batido ascendente pie izquierdo y segundo barrido ascendente brazo izquierdo.
9. Batido descendente pie izquierdo y segundo barrido ascendente brazo izquierdo.
10. Batido descendente pie izquierdo y fin de la fase propulsora brazo izquierdo.
11. Batido descendente pie izquierdo y recobro brazo izquierdo.


5. LA RESPIRACIÓN.


El nadador de espalda, en principio, no necesita un ritmo concreto para respirar y puede hacerlo en cualquier momento ya que la cara no está sumergida. Sin embargo, el "ritmo" utilizado por la mayoría de espaldistas es inhalar mientras un brazo recobra y exhalar durante el recobro del otro, al igual que se hace con el estilo de crol. Este ritmo de respiración facilita un ritmo más uniforme del ciclo de brazadas y una respiración más eficiente.

Igual que el estilo crol, todas las inhalaciones deberán realizarse por la boca, de lo contrario no podríamos tomar el aire necesario y dejaríamos de suministrar a nuestro cuerpo la cantidad máxima de oxígeno. Para exhalar se recomienda hacerlo por la boca y por la nariz.












Bibliografía:
https://sites.google.com/site/natacionconceptos2016/02_estilos/espalda
http://www.i-natacion.com

Comentarios